¿Es justo parar a un país?

lunes, 16 de junio de 2008

En los últimos días se han estado sucediendo paros en los ámbitos del sector de la pesca y del transporte. Es cierto que en este momento nos encontramos ante una situación económica internacional compleja que necesitará de trabajo y esfuerzo conjunto para ser superada. No entraré en las causas sobradamente conocidas que han provocado esta situación, solamente haré referencia a la espectacular subida del precio del petróleo que está provocando dificultades a todas las españolas y españoles.

Hay sectores, aunque influye en todos, con mayor dificultad para hacer frente al aumento del coste de los derivados de esta materia prima y, por ello, el Gobierno, sensible a esta situación, ha puesto encima de la mesa medidas que permitan paliarlas.
Un porcentaje minoritario de transportistas no las aceptan y han tomado la decisión de intentar paralizar al país.

Aún entendiendo lo que representa la subida del precio del petróleo para su trabajo, su rentabilidad y oportunidades, no se puede consentir que a través de la coacción y la violencia se intente ejercer presión para lograr que se implanten medidas que no son posibles.
Por ello hago un llamamiento a la responsabilidad y al diálogo. Sólo a través de estas permisas es posible encontrar soluciones adaptadas a la realidad.

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