martes, 24 de junio de 2008
Los socialistas somos conscientes de las dificultades económicas que estamos atravesando.
No cabe duda de que la situación de la economía internacional deja sentir sus efectos en España.
Frente a las dificultades, el Gobierno ha puesto en marcha medidas dirigidas a reforzar nuestras capacidades de crecimiento sin renunciar al mantenimiento de las políticas sociales.
Hoy ya se puede hacer balance de las medidas tomadas el pasado 18 de abril. Así, hay que señalar que más de 16 millones de contribuyentes ya se están beneficiando de una rebaja fiscal total de más de 6.000 millones de euros y que los avales para los créditos hipotecarios para vivienda protegida y para pequeñas y medianas empresas han sido ya adjudicados a las entidades financieras.
Por otra parte, la licitación de obra pública se incrementó en un 64% respecto al mismo periodo del año 2007 lo que permitirá que se vea su impacto económico en el segundo semestre de este año y en el primer trimestre del que viene.
A todas estas iniciativas hay que añadir las que se presentaron el pasado 13 de junio y que recoge varias medidas fiscales que permitirían que la economía española reciba 7.800 millones de euros en el próximo año, de los que podrían beneficiarse tanto familias como empresas.
Ayer mismo, 23 de junio, se han anunciado nuevas medidas que persiguen potenciar la inversión para favorecer la economía productiva y aplicar una política fiscal que impulse la demanda y aumente la liquidez de las empresas.
Todas estas medidas son un claro ejemplo de la celeridad con que el Gobierno esta haciendo frente a la situación de desaceleración económica a la que nos enfrentamos, sin hacer decretazos ni recortes sociales.
El ejecutivo ha optado por liderar la dinamización de la economía poniendo más recursos en manos de los ciudadanos, de los empresarios y de los emprendedores, no frenando el gasto social ni recortando derechos o servicios como ocurrió durante el Gobierno del PP. Al contrario, las decisiones que se han tomado van dirigidas a seguir protegiendo a los ciudadanos poniendo más recursos en sus manos, sobre todo en las manos de las personas que más lo necesitan.
Este es el modelo que vamos a seguir desarrollando: el de fomentar el crecimiento económico sin renunciar a seguir profundizando en el Estado de Bienestar.
No cabe duda de que la situación de la economía internacional deja sentir sus efectos en España.
Frente a las dificultades, el Gobierno ha puesto en marcha medidas dirigidas a reforzar nuestras capacidades de crecimiento sin renunciar al mantenimiento de las políticas sociales.
Hoy ya se puede hacer balance de las medidas tomadas el pasado 18 de abril. Así, hay que señalar que más de 16 millones de contribuyentes ya se están beneficiando de una rebaja fiscal total de más de 6.000 millones de euros y que los avales para los créditos hipotecarios para vivienda protegida y para pequeñas y medianas empresas han sido ya adjudicados a las entidades financieras.
Por otra parte, la licitación de obra pública se incrementó en un 64% respecto al mismo periodo del año 2007 lo que permitirá que se vea su impacto económico en el segundo semestre de este año y en el primer trimestre del que viene.
A todas estas iniciativas hay que añadir las que se presentaron el pasado 13 de junio y que recoge varias medidas fiscales que permitirían que la economía española reciba 7.800 millones de euros en el próximo año, de los que podrían beneficiarse tanto familias como empresas.
Ayer mismo, 23 de junio, se han anunciado nuevas medidas que persiguen potenciar la inversión para favorecer la economía productiva y aplicar una política fiscal que impulse la demanda y aumente la liquidez de las empresas.
Todas estas medidas son un claro ejemplo de la celeridad con que el Gobierno esta haciendo frente a la situación de desaceleración económica a la que nos enfrentamos, sin hacer decretazos ni recortes sociales.
El ejecutivo ha optado por liderar la dinamización de la economía poniendo más recursos en manos de los ciudadanos, de los empresarios y de los emprendedores, no frenando el gasto social ni recortando derechos o servicios como ocurrió durante el Gobierno del PP. Al contrario, las decisiones que se han tomado van dirigidas a seguir protegiendo a los ciudadanos poniendo más recursos en sus manos, sobre todo en las manos de las personas que más lo necesitan.
Este es el modelo que vamos a seguir desarrollando: el de fomentar el crecimiento económico sin renunciar a seguir profundizando en el Estado de Bienestar.
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